Ghandi marcha al mar y no paga impuestos a la sal.
Fecha de Noticia: Marzo 5, 2014
Corría el año 1930 y el Imperio Británico tenía una extensión tan grande que no existía continente habitable sin colonia británica.
La joya de ese imperio era la India, con, Lord Mountbatten como Virrey y con 350 millones de habitantes. Tan importante era la colonia que la Reina Victoria adicionó oficialmente a sus títulos el de Emperatriz de la India.
Los tiempos cambiaban y el imperio tendría 20 años más antes de desmoronarse. El arma, en el caso indio, fue la paz. A diferencia de los libertadores de latinoamérica, Ghandi no usa espada, no tiene rango militar y no llegó a disparar ni un sólo rifle con rabia. El arma de Ghandi fue la resistencia pacífica y así lo demostró un 12 de marzo cuando decidió marchar al mar.
La marcha tenía como propósito desafiar el impuesto a la sal establecido por la corona británica. Este impuesto se puso con la intensión de hacer incomprable la sal producida en India e incentivar que la colonia comprase sal producida en Inglaterra. La India resentía ese impuesto porque la sal, particularmente en las costas de Gujarat, se formaba en invierno por la evaporación natural del agua de mar y podía ser tomada en forma fácil de las costras que se formaban espontáneamente.
Así las cosas Ghandi decide desafiar al Imperio y marcha al mar con la intención, simbólica, de tomar un puñado de sal sin pagar el impuesto británico. Ghandi empezó su marcha un día 12 de marzo desde Ahmedabad y caminó por 24 días hasta llegar al mar en Dandi. Entre los dos lugares existen 240 millas, una distancia similar a caminar desde la ciudad de Panamá hasta Tolé, en Chiriquí. A Ghandi lo acompañaban 78 seguidores cuando salió de Ahmedabad y se le unieron cientos, luego miles.
La corona británica entendió, con el tiempo, que era inútil mantener a la India como colonia y decidió, gracias a Ghandi, que el país fuera independiente.
Nuestro país honra a Ghandi con una plaza ubicada cerca de la 5 de Mayo a unos pasos de donde hoy se construye una de las paradas del Metro de Panamá. En esa plaza se puede apreciar una estatua de Ghandi caminando en solitario, con un bastón en la mano.